"Mejor ser un pagano que un iluminado"
Fascinante cuento perverso; dulce y deliciosa, primero, y amarga e incómoda después, como las granadas; me hipnotizó el paisaje (Escocia, otra vez), los personajes todos, el color de la copia, la actuación de C. Lee (que está... hasta guapo) y la música (preciosa la tonadilla del apareamiento, que cantan los jóvenes en la taberna la primera noche).
¿Lo único malo de la película?
- Es una pena verla conociendo ya la historia (aunque sea a través de la tontísima versión con N. Cage).
- El peinado de Cristopher Lee (su estilista merecería haber sido sacrificado también en la pira...).